¿Es realmente necesario que una mujer elija entre una carrera profesional y ser madre?

WELFARE: FÁCIL DE DECIR, DIFÍCIL DE HACER

Ser madre puede implicar el riesgo de poner en peligro la carrera profesional, ya que las presiones sociales y de trabajo pueden dificultar la reincorporación al empleo o el progreso en la carrera profesional una vez que se ha sido madre. Esta condición lleva a las mujeres a posponer el momento de la elección, favoreciendo el empleo en detrimento de la natalidad.

En Italia, en comparación con otros países, las mujeres deciden cada vez menos asumir la maternidad y cada vez más retrasan esta opción hasta una edad más avanzada. Entre los 27 Estados de la Unión Europea, Italia ocupa el primer lugar por ser el país en el que las mujeres en el momento del nacimiento de su primer hijo tienen, de media, la edad más elevada, con 31,7 años. Además, hay 22 de los 27 países de la UE en los que las mujeres con tres hijos tienen tasas de empleo más altas que las italianas con un solo hijo.

Así que nos preguntamos: ¿cuál es el problema en nuestro país?

En Italia, la precariedad y la ausencia de ayudas económicas adecuadas son aspectos que disuaden a las mujeres de tomar la decisión de tener hijos.

Que los países ricos tengan una alta tasa de natalidad sólo es posible con importantes políticas de welfare. Por ello, políticas públicas más favorables a la familia, iniciativas medidas para promover una cultura organizativa más integradora y el apoyo activo de las empresas para apoyar activamente a las mujeres en el lugar de trabajo ayudándolas a conciliar trabajo y familia son aspectos a los que Gemels tiene sensibilidad.

Por estas razones, Gemels S.p.A. ha introducido desde hace varios años un plan de welfare empresarial para apoyar a las familias de sus empleados, independientemente de su sexo, subvencionando los gastos de guardería y escuela infantil. Una clara demostración del éxito de este proyecto han sido los 12 nacimientos celebrados por Gemels S.p.A. desde la introducción del incentivo, una cifra importante para una empresa de unos 50 empleados.

Esta ayuda no es sólo una asistencia financiera inmediata, sino que también refleja el compromiso de la empresa de apoyar la paternidad y promover la igualdad de género creando un entorno laboral integrador a largo plazo.